¿Qué son las electroválvulas? ¿Cómo funcionan? – Jardinería

Una buena forma de mantener a tus plantas del jardín cuidadas y saludables es comprando una válvula solenoide para distribuir mejor el agua por el patio. Tal es así que, debes saber cómo funcionan las electroválvulas de riego y qué debes tener en cuenta para su montaje con tu sistema de riego con el fin de lograr los mejores resultados.

¿Qué son las electroválvulas?

Las electroválvulas son dispositivos eléctricos que sirven para controlar el flujo de líquidos a una plantación. También, se las conoce como válvulas solenoides y no solo sirve para distribuir el agua, sino que, también, pueden usarse con gas, combustible, vapor y aire.

En el ámbito de la jardinería, las electroválvulas de riego funcionan mediante un sistema de apertura automática que se activa por el programador conectado a las tuberías. Algunos modelos de válvulas poseen la capacidad de cierre instantáneo cuando dejan de recibir la señal en el solenoide, evitando así el desperdicio del agua.

¿Cuáles son las modalidades de las electroválvulas que existen?

Para saber cómo funcionan las electroválvulas de riego para jardines o patios, debes identificar las diferentes modalidades que existen según el uso que piensas darle a cada dispositivo. En este ámbito se distinguen las siguientes:

Acción directa

Dentro de esta modalidad podemos distinguir las electroválvulas normalmente cerradas y las electroválvulas normalmente abiertas. Las cerradas son las que bloquean el orificio cuando no recibe la señal energética, impidiendo así, la salida del líquido. Una vez que se energiza la bobina, el embolo magnetizado se encarga de desbloquearlo para facilitar el riego del jardín.

Las normalmente abiertas, en cambio, mantienen la misma posición de apertura aún cuando la bobina no se encuentra energizada y, una vez que recibe la energía necesaria para activarse, empuja el resorte para que se bloquee el orificio y evitar que el líquido fluya por sus componentes.

Acción indirecta

Para saber cómo funcionan las electroválvulas de riego con acción indirecta, te explicaremos brevemente sus principales características: esta válvula es accionada mediante un comando eléctrico conectado al embolo, logrando así que el diafragma principal se abra o cierre según el tipo de programación ingresada al sistema de riego.

Esta clase de válvulas solenoides solo necesitan de una presión mínima para que funcionen correctamente. Y, al igual que las electroválvulas de acción directa, las indirectas también se clasifican en normalmente abiertas y normalmente cerradas.

Acción mixta

Por último, están las electroválvulas de acción mixta, cuyo funcionamiento se lleva a cabo de forma similar a la de acción indirecta: programando un comando de apertura de dos tiempos para vaciar el diafragma grande y, posteriormente, presionarlo para conseguir abrirlo.

En este caso, el embolo está formado por un resorte instalado en el diafragma grande y que permite acelerar la presión de abajo arriba para que la apertura se realice con éxito. También, podemos encontrar las válvulas normalmente abiertas y normalmente cerradas, tal como lo apreciamos en las modalidades directas e indirectas.

La similitud que tienen las electroválvulas de acción indirecta y las de acción mixta es que sus diafragmas son utilizados según el tipo de material que deseas acumular en dichos dispositivos. Algunos pueden soportar temperaturas menores a 10°C y, otros, toleran hasta los 180°C.

¿Cómo funcionan las electroválvulas de riego?

Normalmente, las electroválvulas de riego para jardín son colocadas bajo tierra dentro de arquetas de plástico. El mismo cumple la función de facilitar su acceso y evitar que los niños toquen dicho dispositivo.

Las electroválvulas funcionan a base de electricidad, sin embargo, no hay por qué preocuparse por el contacto con el agua. La tensión suele ser de entre 12 a 24 voltios, por lo que, no habría peligro de electrocución aún estando en un ambiente bastante húmedo. Y al colocarse en la tierra, puede resistir a cualquier cambio climático a diferencia de otras válvulas instaladas en la superficie.

Entre los componentes principales de una electroválvula se encuentra el solenoide, cuya función es la de recibir la señal eléctrica para hacer funcionar el dispositivo. También, es ahí donde se conectan los cables del programador para establecer horarios de activación de riego durante tu ausencia.

Además de eso, el solenoide también se encarga de mover la membrana instalada en el interior de la electroválvula y la cual facilita el paso de agua. La función de dicha membrana es la de unir el cuerpo de la válvula con la tapa y, generalmente, está hecho de un material muy flexible como el caucho.

Una vez tengamos en cuenta dichos componentes y sistemas de rendimiento de estos dispositivos, explicaremos paso a paso cómo funcionan las electroválvulas de riego instaladas en tu patio o jardín:

1. Mientras el dispositivo está inactivo, la membrana impide el paso del agua.
2. Cuando activas el programador, éste da la orden de activar la válvula enviando la señal directamente al solenoide mediante electromagnetismo.
3. El solenoide transforma la energía eléctrica en energía hidráulica para que la electroválvula se active.
4. Una vez activado el dispositivo, se abre el orificio situado en la tapa para habilitar el paso del agua acumulado en ella.
5. El agua se dirige directamente a las turbinas o los difusores conectados a tu sistema de riego.
6. Y así es expulsado con fuerza hacia las plantas.

Distinguir entre los diferentes sistemas de acción de cada válvula y saber cómo funcionan las electroválvulas de riego, te ayudará a optimizar el sistema de riego en tu jardín y podrás darle una mejor salud a tus plantas.

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